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El Atlético Mancha Real coge moral tras vencer al Estepona
El cuadro de Aybar se impuso en los penaltis a los malagueños de Segunda B en la XXX edición del Trofeo 'Villa de Mancha Real'

El Campo de la Juventud acogió este pasado miércoles la trigésima edición del Trofeo 'Villa de Mancha Real', un choque que enfrentó al conjunto local, el Atlético Mancha Real, con el Estepona, equipo que milita en la Segunda División B. El cuadro entrenado por José Jesús Aybar se alzaría con el torneo tras igualar a cero durante el tiempo reglamentario e imponerse en la tanda de penaltis, que finalizaría 4-3 para los locales con tantos de Mateo, Blas, Expósito y Fran.
Unos cuatrocientos espectadores disfrutaron con un partido que sirvió de bálsamo tras la última derrota liguera y que significó un nuevo trofeo para las vitrinas locales. Micaela Martínez, alcaldesa de la localidad, y Alfonso Martínez, primer teniente alcalde, serían los encargados de realizar la entrega del trofeo.
Antes del comienzo del choque se estrenó el himno del Atlético Mancha Real, que interpretó la agrupación Villa de Mancha Real bajo la dirección de Juan Paulo Gómez, autor de la música. Cabe destacar que la composición de la letra es obra del joven estudiante local, Manuel Morillas Sánchez. Cantaría el himno el barítono Juan Sedenio.
Entre las curiosidades del partido hay que mencionar la presencia en las filas malagueñas del futbolista internacional, Catanha, y del hermano del torero José Tomás. Por parte del Atlético Mancha Real destacó la alineación durante el segundo acto del joven meta Raúl, artífice de la victoria desde los once metros.
Desarrollo
En lo que se refiere al desarrollo del partido, hay que decir que el Atlético Mancha Real sorprendió a su rival y mantuvo el dominio durante los primeros minutos, obligando al equipo de Procopio a emplearse a fondo en defensa. A partir del minuto quince cambiarían las tornas y los visitantes destacarían por su movilidad en busca de la meta de Mendoza, pero los de casa realizarían una buena contención aunque no aprovecharían sus oportunidades en ataque.
La segunda mitad comenzaría con dos claras ocasiones malagueñas, pero los locales no se arrugarían y responderían con ataques de Negro y Blas, aunque ningún jugador conseguiría desnivelar la balanza. Los mancharrealeños demostraron que la diferencia de categoría no era un obstáculo y deleitaron a los aficionados locales.

Fuente: ideal.es